Se reduce el consumo de materiales, el consumo de agua en la obra es considerablemente inferior respecto de las obras “húmedas”, se habla de “obras limpias” por el mismo motivo y por el bajo desperdicio de materiales que se maneja.

Además, debido a la creciente preocupación de los consumidores por el medio ambiente es necesario tomar decisiones informadas sobre el impacto de sus actividades. Es por esto que, organismos independientes (y algunos productores de acero) en todo el mundo han realizado análisis de ciclo de vida sobre los impactos ambientales de la utilización de acero en la construcción.

Basándose en estos resultados, los arquitectos libremente pueden especificar los productos de acero en sus diversas formas para proyectos de todos los tamaños.

El acero es 100% reciclable. Los programas de reciclaje de acero permiten además reducir el flujo de residuos sólidos, lo que ahorra espacio en los sitios de disposición final y la conservación de los recursos naturales.

Cerrar